Los devastadores eventos, los cierres y la incertidumbre crearon un frenesí en la educación, desde las escuelas primarias hasta las universidades, en 191 países, independientemente del estatus social y económico de los estudiantes. Cada país ha estado lidiando con esta alarmante situación de manera diferente dependiendo de sus recursos.

Reorganizar los modelos educativos, las aulas, las interacciones cara a cara y transferirlos al entorno online, en un corto plazo de tiempo, ejerce una enorme presión sobre los administradores y los profesores de las instituciones educativas. Afortunadamanente, tenemos disponibles tecnologías y métodos educativos que pueden ayudarnos a transformar y hacer más llevadero el proceso de digitalización. Para ello recomendamos adoptar las siguientes pautas:

1. Aprendizaje en línea entretenido

En la era de YouTube, TikTok, Netflix, parece una misión imposible lograr que los estudiantes se entusiasmen tanto con el material escolar como con el resto de contenido en línea. Aunque podemos utilizar tecnologías similares, por ejemplo, incorporar videos en el plan de estudios o dar un paso más alla e introducir tecnologías como Realidad aumentada / Realidad virtual en el aula. Las simulaciones participativas colaborativas también aumentan la motivación, las habilidades para resolver problemas y crean una actividad en el aula atractiva y divertida para los estudiantes.

2. Acceso a Internet y computadoras portátiles para todos

Uno de los principales problemas de la educación en línea o eLearning es que, según la región, como mínimo el 14% de los hogares carecen de acceso a Internet según las estadísticas de la UIT y/o un dispositivo individual para cada alumno. No solo las familias, sino las escuelas mismas no tienen los recursos y la infraestructura para brindar una educación online adecuada. Afortunadamente, en muchos países, las ONG han acudido al rescate y han comenzado a recaudar fondos para poder donar computadoras a estudiantes desfavorecidos. Paralelamente, algunos gobiernos han tomado medidas de excepción para dotar partidas presupuestarias específicas para combatir las desigualdades de recursos teconológicos en educación.

3. Transformación de bibliotecas

Los profesores y los estudiantes pueden ser uno de los principales beneficiarios de bibliotecas que experimentan una transformación masiva, de tener presencia y acceso sólamente físico a ofrecer su catálogo en línea. Muchas bibliotecas han comenzado a ofrecer libros electrónicos gratuitos, herramientas educativas y otros servicios en línea. La empresa Odilo, una biblioteca digital inteligente, es un gran ejemplo de esta transformación, ya que trabajan para “democratizar el acceso a la educación de alta calidad, creando un mundo con aprendizaje ilimitado con posibilidades para todos”.

4. Personalización

El debate sobre el la necesidad de rediseñar las aulas y los métodos de enseñanza había comenzado mucho antes de que estallara la pandemia. Los últimos meses nos han demostrado, aún más, la relevancia de esta discusión, ya que algunos estudiantes prosperan y brillan donde otros luchan por seguir el ritmo de las clases. Las encuestas de todo el mundo han revelado que muchos estudiantes echan de menos las interacciones humanas y la experiencia en el aula, por lo que la digitalización de la educación se ha convertido en un reto mayúsculo.

Aún así, no debemos olvidar que a muchos niños en edad escolar les resulta difícil concentrarse en una sala llena de compañeros de clase, ya que los niños probemáticos, la ansiedad social o un ritmo de aprendizaje diferente les impiden rendir al máximo. Las herramientas de EdTech que se adaptan a la velocidad de aprendizaje de los estudiantes, proporcionándoles contenido individualizado y retroalimentación en tiempo real, pueden ser beneficiosas para todos los alumnos.

5. Transformación de las responsabilidades de los estudiantes, profesores y padres

Los maestros no deben tener miedo de pasar a un segundo plano a medida que aumenta la tecnología en la educación. No en vano, su función de inspirar, involucrar, explicar y educar a los estudiantes para que se conviertan en adultos respetuosos, motivados y apasionados por adquirir conocimientos seguirá siendo crucial. A su vez, con la ayuda de la tecnología, los padres pueden seguir el progreso y las tareas de sus hijos mientras los estudiantes se involucran más en sus propios estudios y se familiarizan con su propio estilo y ritmo de aprendizaje.

La pandemia catalizó el proceso hacia mejores sistemas educativos que terminarán asentados en un futuro próximo. Sistemas educativos que son una delicada coreografía de tecnología, personalización y experiencia en la educación de los alumnos.